viernes, 12 de octubre de 2012

Cervezas: Mateo y Bernabé 21 (Mateo)


Análisis previo:


Mateo y Bernabé (and friends) presumen de ser la primera marca de cerveza artesanal de La Rioja, tierra conocida por sus "caldos" (vinos) y por su buena gastronomía.

Tienen dos cervezas: la Mateo 21 y la Bernabé 11. Hoy nos ocupamos de la 21 porque a veces somos muy rebeldes y no nos gusta seguir órdenes numéricos :P

Nos encontramos, según su página web y según el cartoncito que lleva colgada la botella, ante una cerveza de tipo weizenbier. Yo que soy un inculto y me pierdo con tanta clasificación y subclasificación, os comentaré después de buscarlo que a grandes rasgos es una cerveza blanca de trigo. La verdad es que viéndola, oliéndola y probándola no hace falta la explicación porque cumple en todo.

Antes de empezar la cata, nos fijaremos en la etiqueta: un corquete de cortar racimos de uvas. La Rioja cervecera, sí, pero también vinatera... es el espíritu :)



La cata:


Y aquí nos encontramos dispuestos a abrir la botella. Y nos cuesta, porque por alguna extraña razón no nos engancha bien el abrebotellas. Al final, poco a poco, conseguimos abrirla.

Echamos como siempre una olida sin haber mirado previamente lo que era una weizenbier y ya nos vamos haciendo a la idea de lo que nos espera: huele a la típica cerveza alemana de trigo que echas en vaso largo y tiene espuma cremosa y blanca.

Y sí, tal cual, echa una espuma blanca nuclear bastante grande formada por burbujita fina que desaparece más o menos rápido y casi completamente.

A contraluz la cerveza es translúcida, aunque se ven burbujillas juguetonas correteando y luchando por llegar a la superficie. El color, pálido amarillento, como las blancas :)

Olemos en copa y nos llega un olor sutilmente ácido asidrado con toques muy lejanos a fruta de algún tipo.

Probamos y las burbujas nos saludan demasiado efusivamente. Estamos ante una de esas cervezas con las que hay que tener cuidado en boca si no queremos echar toda la espuma por la nariz. Burbuja pequeña, violenta, juguetona, refrescante y muy picante.

Sobre el sabor, continúa el asidrado y nos sigue recordando a las cervezas alemanas de trigo. No son mis favoritas (de hecho me caen bastante mal), así que mi opinión al respecto puede ser un poco contraria. En cualquier caso, se deja beber fácilmente y el que me recuerde a un txakolí o una sidra lo hace todo más fácil.

En el tema del alcohol no hay mucho que decir. Si me dijeran que esto es un refresco "me lo creería": 5% sin ningún tipo de afán de protagonismo, cosa que realmente se agradece y mucho.

En cuanto al amargor, la verdad es que no se nota prácticamente nada. Al menos si la comparamos con las cervezas normales. Algo queda, pero en general lo que más me asalta es una maltosidad enorme. Sensación pegajosilla por toda la boca, agradable.

A medida que avanza el calorcito sobre la cerveza, podemos observar que no es de las que tienes que tirar a la basura. Parece que tiene más cuerpo, menos picor y algo menos de burbuja, pero sigue siendo una cerveza maltosa e interesante.

En conclusión, no espereis la mejor cerveza del universo (dudo que exista), pero sí que os podeis encontrar una cerveza asidrada blanca de trigo bastante interesante hecha en la tierra de la uva que bien puede valer para una tarde diferente.

Porque qué narices, no es necesario ser alemán para hacer una cerveza de trigo o una cerveza buena. Os lo dice alguien que huye de este tipo de cervezas y que ésta se la ha tomado como un campeón sin poner cara de asco ;)

Apunte final #1, cuando ya no le quedan casi burbujas y está templada, se rebaja muchísimo el toque asidrado y aparece un frutal dulzón muy muy rico. Y, oh sorpresa, aparecen positos de levadura... ¡¡ qué majos !!

Apunte final #2, dudo si decir que el medio litro de la botella es suficiente o demasiado... que alguien al que le gusten este tipo de cervezas se pronuncie (para mí ha sido justo rozando el límite entre suficiente y demasiado).

Apunte final #3, el que haya conseguido acabármela siendo del tipo que es... buena señal, ¿no? Pues eso.

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