lunes, 1 de agosto de 2011

El sueño de un pequeño astronauta


Cuenta la leyenda, que tiempo ha, los sabios y ancianos de un pueblo se enfrentaron a un gran misterio.

Se dice que en su aldea habitaba un chico que nunca dormía, ni comía, ni compartía su vida con el resto de la gente. Tan sólo se dedicaba a correr con los brazos extendidos durante el día y a mirar al cielo, en silencio, durante toda la noche.

Los sabios se reunieron, conjuraron, medicaron, trataron y obraron su magia con aquel chiquillo, pero nada funcionó.

Nada, hasta que un día de repente el chico dejó de correr. Los ancianos y los sabios se alegraron, pensando que por fin le habían sanado. Cuál fue su sorpresa cuando vieron que tan sólo había cambiado sus carreras por un constante ir y venir de herramientas y materiales extraños.

Un corrillo de aldeanos murmurando se instaló permanentemente a su alrededor. No comprendían qué hacía y le miraban con recelo, curiosidad, miedo.

Pasaba el tiempo, y el montón de herramientas y materiales iba tomado forma. Una especie de cascarón gigante del que el chico no paraba de entrar y salir. Pero poco más había había cambiado: Construcción de día, silencio y reposo mirando al cielo de noche.

Una noche, mientras el chico permanecía sentado observando su obra finalizada, una niña salió del corrillo, se le acercó y le dijo "nunca conseguirás llegar a ningún sitio con eso". El chico sin quitar la vista de su máquina sólo dijo "sólo el que se olvida de sus prejuicios y sus miedos es capaz de alcanzar el infinito y cumplir sus sueños...y ha llegado el momento de que yo cumpla el mío".

Después de estas palabras, se levantó y desapareció dentro de su extraña máquina. La encendió y, con un ruido ensordecedor, empezó a levantarse del suelo.

Todos los aldeanos huyeron asustados de la magia de aquel cascarón y, escondidos entre la maleza, observaron cómo cada vez se alejaba más y más de ellos.

Nada más se volvió a saber de él. Tan sólo permanece la leyenda del chico que desapareció en medio de la inmensidad del cielo estrellado dentro de un cascarón. La leyenda de un chico que había cumplido su sueño: El sueño de un pequeño astronauta...

Y es que no sólo la cocina es mi pasión, también escribir me ha gustado desde siempre. Sinceramente, espero que os haya gustado, porque de vez en cuando, pondremos recetas acompañadas de pequeños relatos.

En cualquier caso, como esto no es sino un blog de cocina, procedamos a la receta de esta pequeña escenificación :)



Los ingredientes:


- Kiwano (¿Qué es un kiwano?)
- Kiwi
- Fruta de la pasión
- Mangostán
- Azúcar
- Nata
- Manzana
- Carambola
- Un mapache de juguete
- Un pequeño astronauta



El proceso:


Utilizaremos dos tipos de helados (¿cómo hago un helado?): un helado de kiwi y otro de fruta de la pasión con mangostán. Una vez probados los dos métodos de elaboración, puedo decir que queda infinitamente mejor con un poquito más de nata y con el almíbar correspondiente.

Necesitaremos extraer la pulpa del kiwano y recortar un aro de la cáscara. Reservaremos la mitad de una de las cáscaras del mangostán y le haremos un agujero.

Finalmente, cortaremos unas rodajas de carambola, y haremos lo propio con un "orejón" de manzana.



La finalización:


Como podeis observar, es una receta que no tiene mucho misterio más allá de una combinación de frutas y una presentación diferente que puede gustarle a los niños.

Con la pulpa del kiwano haremos el fondo estrellado del universo.
Con la carambola, tendremos unas bonitas estrellas y una fruta muy peculiar.
Con la manzana haremos una media luna.
Con los helados, haremos dos planetas, uno de los cuales rodearemos con la cáscara del kiwano.
Con la cáscara del mangostán, haremos la nave espacial del pequeño astronauta.
Para terminar, el pequeño astronauta irá dentro de su pequeño cascarón :)

Al final, este es un postre fácil, muy muy veraniego, con una variedad de frutas muy aceptable y con una variedad de sabores que cautiva por sus contrastes dulces y ácidos.

Esperamos que os haya gustado porque a nosotros, desde luego, nos encantó :)

1 comentario:

  1. Me ha encantado!!! Al igual que el nombre del blog... es curioso y divertido!!! jejejej
    Vengo de cocinillas en accion ^___^ y me quedo como seguidora ;-)
    Un besote
    Sònia

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