Después de nuestro pastel hojaldrado de carne, queso y cerveza, teníamos aún en el frigorífico algo de queso viejo Old Amsterdam. Dado que el queso (en especial el viejo, aunque éste me agrade bastante más que los demás viejos) no me gusta para comerlo sin más, me puse a pensar una receta para poder usarlo.
La premisa inicial era que no debía ser una receta normal. Nada de hacer unos macarrones o una pizza con ello. De repente, se me vino a la cabeza la imagen de las fondant de chocolate y capuchino que hicimos el otro día. Todo tenía sentido: quería hacer magdalenas desde hacía tiempo, era una receta original y sólo tenía que buscarle un acompañamiento.
El material usado:
- Rallador
- Horno
- Recipientes especiales para horno
- Microondas
Los ingredientes:
- Queso viejo Old Amsterdam
- Hierbas provenzales
- Jamón serrano
- Menta
- Huevo
- Harina
- Mantequilla o margarina (que aunque no sean lo mismo...)
- Levadura de sobre
- Azúcar
El proceso:
El proceso no puede ser más sencillo: mezclar todo y agitar. Bueno, vale, es un pelín mas complejo que eso, pero más o menos por ahí van los tiros. La intención es que salgan cuatro magdalenas, así que hoy especificaremos las cantidades :)
En un recipiente para mezclar echaremos un huevo y 50 gramos de azúcar. Batiremos bien batido hasta que no podamos casi mover el brazo y el huevo esté cremoso. Fundiremos 50 gramos de mantequilla o margarina en el microondas (atención, poned muy poco tiempo o causareis un desastre) y lo añadiremos a la mezcla anterior.
Aprovecharemos y haremos un descanso para añadir media cucharada (tamaño café) de levadura de sobre y 50 gramos de harina. De paso y ya que estamos, echaremos hierbas provenzales y menta según el antojo de cada uno. Dejamos de descansar y volvemos a mezclar para incorporar bien la harina a la mezcla. Cuando hayais hecho bien los deberes, podreis descansar de verdad durante unos 15 minutos, tiempo que aprovechareis para el precalentado del horno a 180º (calor arriba y abajo).
¿Y el queso? Con el rallador y el queso rallaremos fino una cantidad que estimemos oportuna, dependiendo de la apetencia y el gustirrinín que dé el queso a cada cual. En este momento deberíais de tener por un lado una masa amarillenta bastante espesa oliendo ligeramente a fermentación y a hierbas y por otro lado un montón de queso rallado. Cogemos los botecitos individuales y...
Para que no se pegue la magdalena, deberemos untar previamente el recipiente con margarina primero y harina después. Poned especial cuidado en que se quede lo justo, para que no se haga un pegote: con un dedo extendeis un pizco de mantequilla y luego espolvoreais y repartis bien la harina, quitando el sobrante mediante unas sacudidas.
Ahora echamos parte de la mezcla en cada tarrito. No vamos a echar la cuarta parte correspondiente a cada una de ellas, no. Vamos a echar un poco para poder dejar el queso en el núcleo de la magdalena. Así pues, pondremos parte del queso rallado y luego cubriremos con otro poco de pasta. La idea es que al final quede aproximadamente un cuarto del recipiente vacío.
Metemos al horno durante unos 15 minutos a 180º, no abrimos la puerta en ningún momento y lo dejamos tranquilamente más o menos en el medio del horno. En mi caso, como tengo un horno un poco extraño, lo he tenido que dejar un poco más abajo para que no se quemen por arriba. Las magdalenas crecerán (yo pensaba que crecían todas igual, pero ya he visto que no) y tendrán aspecto muy rico. Pasados los 15 o 20 minutos, apagais el horno y las dejais dentro reposando. Si las sacais inmeditamente, las magdalenas se hundirán y tendreis un bollito un poco (más) raro.
La finalización:
Dado que esta receta iba de salados, hemos decidido presentarla con unas flores de jamón serrano. Desmoldar las magdalenas no debería ser muy difícil gracias a la mantequilla y harina puestas, así que vuestra única preocupación debería ser "¿cómo se hacen esas flores?". Básicamente, haciendo un gurruño con elegancia :)
No tengais miedo a la mezcla de dulce con salado, que no pasa nada. Pensad que habeis comido hamburguesas y kebabs, así que... tampoco es para tanto ;)
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