jueves, 15 de septiembre de 2011

Salsa acigridulce

Continuamos poblando la sección de salsas y marinados, hoy con una clásica de nuestros platos, el agridulce, pero con un toque ácido increíble.

Esta receta ha salido de un pequeño y transitorio estado de locura al abrir mi frigorífico. Yo quería hacer salsa agridulce "tradicional", pero...

...resulta que ahí estaban mis queridos amigos los balsámicos frutales y no me he podido resistir.

Digamos que la receta más o menos estándar de agridulce es "tomate y/o ketchup, azúcar o almíbar y vinagre".

Hasta aquí estamos de acuerdo en que se consigue un agridulce anaranjado o rojizo muy apetecible. Yo habitualmente lo que hago es almíbar (o agua y azúcar) y vinagre de módena con vinagre de manzana. Así tenemos un agridulce exprés oscuro y muy sabroso.

Hoy hemos aprovechado una sartén de freír cerdo y hemos hecho ahí directamente el acigridulce. Digo yo que algo del cerdo se le habrá pegado...

No os puedo dar medidas porque por suerte o por desgracia me he convertido en ese tipo de personas que rige sus recetas por olor y no cantidad.

El caso es que hemos empezado con el almíbar de un bote de piña...en almíbar :)

Posteriomente hemos procedido a echar ketchup, ni mucho ni poco, algo coherente y razonable. Con esto tenemos casi todo el "dulce" de la salsa, un rico sabor y un ligerísimo toque "aci".

Después he procedido a echar balsámico de frambuesa y de manzana a partes más o menos iguales. Con esto añadimos sobre todo el "aci" y parcialmente el "dulce" a la salsa.

Finalmente, hemos añadido vinagre de manzana a discreción (es decir, salvajemente) para conseguir el toque "agri".

Las proporciones de los ingredientes dependen más de vosotros que otra cosa. A mí me encanta el "agri" y por eso echo cantidades grandes de vinagre.

Ahora sólo queda esperar a que se vaya reduciendo y concentrando. Cuando quede ya lo suficiente para nuestro plato, echaremos un poco (MUY poco) de maizena o harina disuelta en agua fría. Con esto, iremos espesando la salsa para darle un toque muy fino.

El último paso consiste en, simplemente, colar para quitar los grumos e impurezas que hayan podido ir quedando.

¿Y cómo podemos mejorar o variar esta salsa? Bueno, hay mil maneras.

Mi receta original iba a prescindir de balsámicos e iba a usar mermelada de ciruela. En este caso, deberíamos usar la batidora para hacer una salsa homogénea.

También podemos sustituir o combinar vinagre de manzana con vinagre de módena. Con esto oscureceremos la salsa y le daremos un toque bastante característico.

Se le puede añadir, si le queremos dar un toque un poco más casero, cerveza o vino blanco. Incluso, si queremos darle más color rojizo, podríamos usar vino tinto. En el caso de usar cervezas, yo usaría una tostada, pero si queremos aprovechar las características propias de la cerveza para potenciar el acigridulce, usaremos una lambic de frambuesa: ácido, dulce y tono rojizo espectacular.

Finalmente, podemos optar por vodka negro. Esto nos dará dulce, y un peculiar color morado oscuro.

¿Y con qué acompañaremos esta salsa? Perdón, ¿a qué acompañará esta salsa? Pues fundamentalmente verduras, pasta sola, arroz, rollitos primavera, pollo, pato o cerdo. Incluso, si apuramos, seguro que ciertos pescados.

1 comentario:

  1. ME SALVARON EL DIA TENGO UN PEQUEÑO RESTAURAN Y NO SABIA Q ASER DE COMER DE ECHO ESE DIA YBA A REPETIR UN PLATIYO EN EL MENU PERO ESTA RESETA ME A GUSTADO MUCHO Y DE ECHO HAORA ES UN EXITO ACA GRASIAS

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